“No dudo de que estos jugadores nos van a llevar a cumplir el objetivo. No ahora en el mes de febrero, pero sí en el mes de mayo”. La confianza es la clave del éxito y las palabras de Fran Fernández, sumadas a las de Pedro León a mitad de semana, tienen que servir como motivación y seguridad. Pero, como las palabras se las lleva el viento, el equipo no solo puede, sino que debe demostrar en el campo que, lo dicho en rueda de prensa estos días, es tan real como el Murcia.

Porque, si de algo se nutre la afición pimentonera es de hechos. De actitud sobre el terreno de juego. De partidos como ante el Hércules y no parecidos al del pasado domingo. Aunque, como bien rezó Gavin Pearce en uno de los grandes hilos que hace por “X” (antes Twitter), esta temporada el murcianismo está abusando de esa obligatoriedad por sentirse recompensado tras años de lucha y perseverancia, llevando la exigencia a un límite que, aun lógica, aprieta tanto que ahoga. 

La unión hace la fuerza, dicen. Y, todavía en febrero, hay tiempo para virar el rumbo en casa y que las malas sensaciones no perjudiquen al equipo a domicilio. Para eso es necesaria la unión de equipo y afición. Sobre todo durante los 90’ de partido. Porque, aunque cueste en momentos delicados como el pasado domingo, actuar en contra solo perjudica al Murcia y beneficia, mucho, al rival. Luego cada cual a sus cosas. Digo.

Pero, volviendo a líneas anteriores, los hechos son la clave para que la afición grana lleve en volandas a los suyos. Porque necesitan poco para hacerlo y así lo han demostrado. Esto, al fin y al cabo, es la pescadilla que se muerde la cola.

El Real Murcia tendrá la oportunidad de, el próximo domingo (16.00h), volver a reenganchar a los menos confiantes en un partido que, seguro, será de máxima exigencia. Para ello Fran Fernández recuperará a Toral, pero tendrá las bajas de Pedro León por acumulación, e Yiriarte y Moha por lesión.

Prueba de fuego teniendo en cuenta la situación del equipo y prueba de fuego por el rival al que se enfrenta. El Mérida, mejor local del grupo junto a Hércules y Ceuta, es el único equipo que no ha perdido en casa. Además, con datos muy positivos, ya que es el segundo local que más goles ha generado.

Se trata de un equipo que no le pondrá las cosas nada fáciles a los granas. Sergi Guilló ha conseguido establecer en el Estadio Romano una hegemonía táctica basada en el protagonismo en posesión, la salida de balón y transitar en pocos toques con un medio campo muy participativo. Todo lo contrario al Real Murcia, algo que puede beneficiar mucho, como ya pasó en la ida, a los de Fran Fernández.

El Mérida no es equipo de arrugarse en partidos rocosos. Todo lo contrario. De ahí que sea una de las plantillas que más encaja de la liga. La sinvergonzonería y el atrevimiento son dos de las principales señas de identidad de un equipo romano que ha encontrado en Guilló el director perfecto para su orquesta.

Diez goles Eslava (tercer máximo goleador del grupo), ocho Liberto y cinco Carlos Doncel. Así está la delantera de un Mérida que acumula 11 goles desde que comenzó el 2025.

Los datos: 

  • Mérida y Real Murcia se han visto las caras en 11 ocasiones, con 5 victorias granas, 5 empates y una sola victoria extremeña.

  • En ninguno de los 11 encuentros se han marcado más de dos goles.

  • Se enfrentan el Mérida, único equipo que no ha perdido en casa, frente al Real Murcia, mejor visitante del grupo.

  • Solo dos equipos (Antequera y Castilla) han hecho más goles que el Mérida (34GF).

  • Solo dos equipos (Alcorcón y Marbella) han encajado más tantos que el Mérida (35GC).

  • El Real Murcia es el conjunto que más goles ha anotado fuera de casa (18GF).

  • El 55% de las porterías a cero conseguidas por el Murcia han sido a domicilio (5/9).

  • El único partido en el que no estuvo convocado Pedro León, el Murcia venció (0-1 en Huelva).

  • El Mérida ha encajado gol en 10 de los 12 partidos jugados en el Estadio Romano este curso.

      Avo Miralles

      @avomirallesf

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